Un porcentaje significativo de la infraestructura de transporte actual se ha diseñado en base al conocimiento y la experiencia de hace décadas. Mientras tanto, el transporte y el tráfico han aumentado drásticamente en volumen y también han cambiado de composición. Por ejemplo, el nivel de seguridad de gran parte de la infraestructura actual, a menudo, ha disminuido en los casos en que no se han tomado medidas intermedias para hacer frente a los cambios en la cantidad, el tipo y la carga de vehículos y equipos.